En sus ritos, cantos y danzas,
el papel de la naturaleza, como ente proveedor de su mundo, se expresa en el
carácter que desempeñan danzantes como El Venado y El Pascola. Es un mundo
donde se canta a las flores, a las aves y a los venados. Otra influencia se
debe, desde la acción de los jesuitas, a la fe católica reflejada en la veneración
de ciertas divinidades como la Santísima Trinidad, San José, San Francisco,
etcétera; ambas influencias, amalgamadas, interactúan en sus tradiciones,
fiestas y creencias.
La religión de los mayos se
organiza en torno a los Centros Ceremoniales o Pueblos Tradicionales, formados
por comunidades más pequeñas congregadas en torno a un santo. En cada uno de
ellos se desempeñan una serie de cargos, designados por las autoridades
religiosas.